ENLACE IÓNICO
Es el enlace que se da entre elementos de
electronegatividades muy diferentes. Este tipo de enlace suele darse entre
elementos que están a un extremo y otro de la tabla periódica. O sea, el enlace
se produce entre elementos muy electronegativos (no metales) y elementos poco
electronegativos (metales).
Los átomos pueden llegar a estabilizarse al ganar o
perder electrones, o al formar iones cargados; la atracción entre iones de
carga opuesta produce enlaces iónicos.
Uno o más electrones se transfieren de un átomo
electropositivo a otro electronegativo. La distancia entre los iones es
suficientemente grande como para que las funciones de onda electrónicas de cada
ión no solapen con las del otro; resultando una distribución esférica de carga
alrededor de cada núcleo. La interacción culómbica neta entre todos los
electrones y el núcleo del catión (Na+) con todos los electrones y el núcleo
del anión (Cl -) viene dada por la ley de Coulomb usando solo las cargas netas
de los dos iones formados. Como ambos iones tienen cargas netas de signo
opuesto, la interacción neta es una atracción. Como resultado, los dos iones
tienen menor energía cuando están juntos (interaccionando) que cuando están
separados; por lo que se produce el enlace químico.
Propiedades
· Temperaturas de fusión y
ebullición muy elevadas. Sólidos a temperatura ambiente. La red cristalina es
muy estable por lo que resulta muy difícil romperla.
· Son duros (resistentes al
rayado).
· No conducen la electricidad
en estado sólido, los iones en la red cristalina están en posiciones fijas, no
quedan partículas libres que puedan conducir la corriente eléctrica.
· Son solubles en agua por lo
general, los iones quedan libres al disolverse y puede conducir la electricidad
en dicha situación.
· Al fundirse también se
liberan de sus posiciones fijas los iones, pudiendo conducir la electricidad.
ENLACE COVALENTE
Es
el enlace que se da entre elementos de electronegatividades altas y muy
parecidas (no metales), en estos casos ninguno de los átomos tiene más
posibilidades que el otro de perder o ganar los electrones. La forma de cumplir
la regla de octeto es mediante la compartición de electrones entre dos átomos.
Cada par de electrones que se comparten es un enlace. Un enlace covalente entre dos átomos o grupos de átomos.
En este tipo de enlace las funciones de onda
electrónica de los dos átomos deben superponerse, para que se forme enlace
químico. Así habrá electrones que pueden describirse como ‘compartidos’ por
ambos átomos y que apantallan de forma recíproca las cargas de los dos núcleos.
Propiedades
· Temperaturas de fusión
bajas. A temperatura ambiente se encuentran en estado gaseoso, líquido
(volátil) o sólido de bajo punto de fusión.
· Las temperaturas de
ebullición son igualmente bajas.
· No conducen la electricidad
en ningún estado físico dado que los electrones del enlace están fuertemente
localizados y atraídos por los dos núcleos de los átomos que los comparten.
· Son muy malos conductores
del calor.
· La mayoría son poco solubles
en agua. Cuando se disuelven en agua no se forman iones dado que el enlace
covalente no los forma, por tanto, si se disuelven tampoco conducen la
electricidad.
· ENLACE METÁLICO
Es el enlace
que se da entre elementos de electronegatividades bajas y muy parecidas, en
estos casos ninguno de los átomos tiene más posibilidades que el otro de perder
o ganar los electrones. La forma de cumplir la regla de octeto es mediante la
compartición de electrones entre muchos átomos. Se crea una nube de electrones
que es compartida por todos los núcleos de los átomos que ceden electrones al
conjunto.
Este tipo de enlace se
produce entre elementos poco electronegativos (metales).
Propiedades
· Temperaturas de fusión y
ebullición muy elevadas. Son sólidos a temperatura ambiente (excepto el
mercurio que es líquido).
· Buenos conductores de la
electricidad (nube de electrones deslocalizada) y del calor (facilidad de
movimiento de electrones y de vibración de los restos atómicos positivos).
· Son dúctiles (facilidad de
formar hilos) y maleables (facilidad de formar láminas) al aplicar presión.
Esto no ocurre en los sólidos iónicos ni en los sólidos covalentes dado que al
aplicar presión en este caso, la estructura cristalina se rompe.
· Son en general duros
(resistentes al rayado).
· La mayoría se oxida con
facilidad.